Cómo escribir una canción

Cómo escribir una canción

Quitémonos esto de encima desde el principio: No existe un método único, claro y universalmente aceptado para escribir canciones.

Preguntar cómo componer una canción es un poco como preguntar cómo cocer un huevo. No existe una única forma de crear música, pero hay un montón de consejos útiles, ejercicios y fragmentos de recomendaciones prácticas a tener en cuenta. Si está interesado en escribir una canción por primera vez, o simplemente en mejorar su proceso de composición, esta guía le será de gran ayuda para empezar.

Nota: Del mismo modo que hay muchas formas de enfocar la escritura de canciones, hay muchos estilos, géneros y estructuras que se encuentran en las canciones. Por comodidad, en esta guía nos centraremos en mostrarle cómo escribir una canción convencional. Las canciones convencionales presentan una instrumentación melódica común, una forma y secciones predecibles y al menos una melodía vocal. Merece la pena dedicarse a la música experimental si tiene interés en escribirla, pero un tema al que volveremos una y otra vez a lo largo de esta guía es la necesidad de mantener las cosas sencillas al intentar crear música por primera vez. Aquí nos ceñimos a la composición convencional porque es sencilla y porque entra dentro de la gama de música con la que la mayoría de la gente está familiarizada.

Lo que necesitará para empezar:

- Lápiz y papel u ordenador portátil para grabar notas y letras.

- Un instrumento musical melódico como un piano, una guitarra o un ukelele. Su instrumento debe ser capaz de producir varios tonos al mismo tiempo.

Nota: Si no tiene un instrumento, siempre puede utilizar un programa de software como GarageBand para crear música. Sin embargo, es mejor no confiar demasiado en estos programas a la hora de crear música por primera vez. Confiar demasiado en loops de batería y progresiones de acordes preescritos deja a los nuevos compositores en riesgo de no ser capaces de desarrollar música por sí mismos.

- Algún tipo de dispositivo de grabación. No lo utilizará para grabar una versión pulida de su canción, sino una maqueta básica que pueda volver a escuchar. Bastará con el equipo de grabación básico que probablemente ya tenga en su ordenador, tableta o smartphone.

No nos adentraremos demasiado en términos de teoría musical en esta guía, pero un amplio conocimiento de aspectos como los acordes, las melodías, la armonía y el ritmo será de gran ayuda a la hora de escribir su primera canción.

Entremos.

1. Experimente con progresiones de acordes

El mejor lugar para empezar a trabajar en su canción es construyendo progresiones básicas de acordes con su instrumento. Un acorde musical se define por dos o más tonos diferentes que se tocan simultáneamente. Con su instrumento, dedique mucho tiempo a experimentar tocando distintas combinaciones de acordes en varios ritmos y estilos.

La música es notable por la forma en que algo tan básico como emparejar dos acordes diferentes tiene la capacidad de crear estados de ánimo y texturas vastas y complejas. Lo que se le ocurra será la base musical de su canción. Siéntase libre de juntar tantos acordes como quiera, pero tenga en cuenta que algunas de las canciones más conocidas de la música popular presentan combinaciones repetitivas de acordes sencillos.

Considere la posibilidad de grabarse durante este proceso, ya que podría tropezar con algunas ideas viables que necesitará recordar más adelante. Cuando encuentre combinaciones de acordes que le gusten, no las pierda de vista escribiéndolas. Lo que está creando ahora mediante este ejercicio le servirá como forma fundamental de su canción. En lugar de intentar escribir todas las secciones de sus acordes sin más, simplemente apunte a construir una sección fuerte con la que pueda desarrollar otras ideas.

2. Centrarse en solidificar las secciones y la estructura

Las canciones convencionales presentan alguna variación de la estructura verso-estribillo-estribillo. Una vez que haya elegido una progresión de acordes con la que trabajar, empiece a estirar y desarrollar ese material en otras secciones. Como mínimo, necesitará dos secciones separadas con las que construir versos y estribillos.

Nota: Muchas grandes canciones presentan las mismas progresiones de acordes repetidas para sus secciones de verso y estribillo. Ciertamente, puede utilizar los mismos acordes en toda la canción, pero para poder crear dos secciones musicales claramente diferenciadas, debería considerar la posibilidad de crear secciones separadas con progresiones de acordes diferentes.

Desarrolle las secciones de verso y estribillo

Piense por un segundo en sus canciones favoritas. Lo que más probablemente recuerde de ellas son sus estribillos. La mayoría de los estribillos suelen ser enérgicos y directos, mientras que las estrofas suelen ser más dinámicas y servir a un propósito narrativo de desarrollo. Cree secciones contrastadas de verso y estribillo y anote los acordes de cada una. Añadir otras secciones como intros, instrumentales, puentes y finales es opcional en este punto. Si es la primera vez que escribe una canción, mantenerla sencilla con una estructura de verso-estribillo-estribillo es una buena idea.

3. Desarrolle una melodía vocal para su canción

Una vez que haya solidificado la estructura de su canción, empiece a tocarla una y otra vez con su instrumento para desarrollar una melodía vocal. Algunos cantantes desarrollan melodías tarareando, mientras que otros cantan lo que suena como un galimatías en un proceso destinado a escuchar lo que funciona y lo que no. Pruebe aquí distintos métodos de vocalización para ver qué le funciona. Cuando se le ocurra una idea vocal que le guste, grábela inmediatamente para no olvidarla más tarde. No se preocupe por las palabras que está cantando en esta fase. Concéntrese en cambio no sólo en las melodías que está produciendo, sino también en el fraseo rítmico de sus ideas.

Este paso debería llevarle una cantidad considerable de tiempo y energía. Escribir una melodía sólida suele requerir mucha experimentación, así que no se precipite en este paso ni se conforme con nada que no le entusiasme de verdad.

4. Escriba la letra y adáptela a su melodía

Muchos aspirantes a compositores llegan a este paso crucial y tiran la toalla por una buena razón. Escribir letras puede ser un proceso difícil e incómodo, sobre todo si es algo que nunca ha intentado antes. Mientras que desarrollar acordes, la estructura de la canción y la melodía son ejercicios musicales, escribir letras no lo es. Para escribir letras significativas, los compositores tienen que explorar partes de su creatividad y perspectiva vital que están totalmente separadas de la música.

Este paso suele requerir una enorme dosis de vulnerabilidad y esfuerzo, por lo que es vital que aborde la escritura de letras sin juzgarlas. Como cualquier otro aspecto de la composición de canciones, recuerde que cuanto más tiempo dedique a practicar la escritura de letras, mejor le irá.

Elija un tema lírico

Su canción puede tratar de lo que quiera: una ruptura, el nacimiento de su hijo, la gripe española, su perro Leonard. Si hay algo que le haya estado rondando por la cabeza últimamente, ése podría ser un buen lugar para empezar a explorar posibles temas líricos para su canción. Su primera canción no tiene por qué tratar de nada serio, y su objetivo aquí debería ser esencialmente conseguir escribir palabras que encajen con la melodía que ha escrito. Inevitablemente, las cosas cambiarán bastante cuanto más desarrolle su canción, así que no sienta que lo que está escribiendo ahora es en absoluto inamovible.

La escritura libre, el ejercicio de escribir rápidamente sin preocuparse por la gramática, la ortografía o el contenido, es una gran herramienta para ayudar a desbloquear ideas líricas. En un trozo de papel o en su ordenador, intente escribir de forma continuada durante diez minutos y compruebe si hay ideas o frases a las que vuelve una y otra vez. Apóyese en estas ideas cuando surjan y utilícelas en su canción.

La letra que escriba puede ser desde su propia perspectiva o en boca de un personaje ficticio creado por usted. Su libertad creativa es ilimitada aquí, pero puede ser una buena idea ceñirse a algo sencillo si es nuevo en la composición de canciones.

Adapte su letra a su melodía vocal

Esta parte puede resultar complicada incluso para los compositores experimentados. Esencialmente, lo que está haciendo aquí es adaptar la letra a la melodía que ha escrito. No se sorprenda si ciertas palabras se alteran, cambian o se recortan por completo para adaptarse a su melodía vocal. Esta parte del proceso de composición requiere mucho trabajo, pero es fundamental para transformar su canción de una idea nebulosa a una pieza musical planchada. Es habitual que en esta fase la melodía siga cambiando y desarrollándose, ya que pasará mucho tiempo cantando y solidificando su voz.

Revise su canción para asegurarse de que sus secciones de estrofa y estribillo suenan definidas y separadas. Si no lo hacen, dedique más tiempo a remodelar sus melodías para que suenen más interesantes. Recuerde que las estrofas actúan como secciones narrativas, mientras que los estribillos suelen basarse en estribillos repetitivos y memorables.

5. Practique su canción y grabe una maqueta de la misma

Práctica, práctica, práctica

Cuando esté satisfecho con la forma en que han quedado la letra y la melodía vocal, es el momento de empezar a tocar y cantar su nueva canción una y otra vez. Cuanto más haga esto, más familiarizado estará con su nueva canción. El hecho de que haya escrito una pieza musical no significa necesariamente que sepa tocarla todavía. Practicar su canción también le ayudará a tener ideas sobre cómo mejorarla.

Nota: Este es el momento en el que un compositor normalmente añadiría instrumentación o producción extra a su canción. Si es nuevo en la composición de canciones, es mejor que no se preocupe por eso todavía. Su objetivo en este punto debería ser simplemente tener una canción básica terminada. Siempre puede volver a revisar su canción y añadirle otros elementos más adelante.

Grabe una maqueta de su canción terminada

Ha llegado el momento de grabar una maqueta de su canción terminada. Si ha estado practicando cantando y tocando su canción, esta parte no debería ser demasiado difícil. No es necesario que la grabación de su canción sea profesional o sofisticada. El objetivo aquí es grabar la idea básica de su nueva canción para que pueda volver a escucharla más tarde. Tomarse el tiempo necesario para grabar profesionalmente incluso algo tan sencillo como una canción con una guitarra acústica y voz es un tema totalmente distinto que es mejor dejar para otra guía. Grabe la mejor versión de su nueva canción y vuelva a escucharla más tarde. Anote lo que le gusta de ella y lo que cree que necesita mejorar.

Reflexiones finales

Escribir música puede ser un proceso difícil, así que si ha llegado lo suficientemente lejos como para haber escrito su propia canción, ¡enhorabuena! Si los resultados de sus primeros esfuerzos por escribir una canción no son los que esperaba, no se desanime. Componer canciones es una habilidad artística que a menudo lleva años de duro trabajo desarrollar. Cuanto más tiempo dedique a hacer música, mejor se le dará. Recuerde siempre guardar sus maquetas porque puede que más adelante se conviertan en canciones que quiera grabar profesionalmente.

Por Patrick McGuire